miércoles, 18 de octubre de 2017

Amsterdam Marathon 2017...


Bueno, esta cara lo dice todo.. he tocado fondo. 
Han pasado ya tres días, y la verdad que no he encontrado los motivos.

A pesar de encontrarme muy bien (de piernas), con muchas ganas, con entrenos las últimas semanas que me llenaban de optimismo, sí, y a pesar de haberme frenado los primeros kilómetros a un ritmo muy fácil de llevar, no pude evitar que fuera la maratón más corta respecto a la distancia competitiva y la maratón más larga respecto al sufrimiento inútil
Resulta final: 3h43. 
Una primera mitad razonable (1h37), y una segunda mitad a ritmo de 6'/km (2h06)....

Aprovecho el puente de 4 días para ir a ver a mis padres, abuela y mis hermanos. Coincido por fin con mi hermano que ha vuelto de NY donde había trabajado durante 2 años, y además me escapo unos días de la tensión creciente en mi estimada Cataluña.  

El jueves hago el último entreno de 9 kms, y las piernas están ligeras como nunca. Nada de turismo, cada día prontito a la cama y así llego bien fresco a la salida de la maratón de Amsterdam.
Hace un par de años disfruté muchísmo de la magnífica maratón de Rotterdam (una ciudad que nunca me había atraído), con marca incluida, y esperaba poder disfrutar de nuevo de una maratón en mi país de nacimiento, en mi ciudad de Amsterdam.

Pero aparcando a un par de kilómetros al sur del estadio olímpico, ya vi que esta maratón iba a ser muy diferente. No había absolutamente nada que hacía presagiar que por las calles de Amsterdam se iba a hacer una fiesta de miles de corredores. Silencio total, que desapareció al acercarme al estadio... por las quejas de primeros automovilistas, molestos por los desvíos de tráfico. 

Es cierto que el alcalde Eberhard van der Laan murió hacía 10 días, y el día anterior habían hecho una conmemoración lo que hacía que la Breakfast Run se celebraba en silencio y con las banderas a media asta. Parece que había hecho mucho para la ciudad, y además había contratado al patrocinador principal de la Maratón. Un hombre muy querido, según me decían. Lo digo porque quizás haya afectado un poco al ambiente de la cursa.

Una feria muy pequeña, casi ridícula (al menos el domingo), donde de hecho había tan solo 1 maratón intentando captar clientes... la de València!!
Muy extraño que todo esto puede pasar en una maratón GOLD LABEL?!?

Pero bien, me sentía muy bien, a pesar de llevar un constipado tremendo desde hacía 10 días, y tras un minuto de silencio salimos a las 09:30 por la pista de atletismo del estadio olímpico. 
Hacía calor, 20ºC, pero tampoco había mucha humedad y al menos el tiempo era ideal para el público. 


Una salida muy estrecha, demasiado, que a pesar de salir yo del cajón sub 3h, tuve que parar un par de veces por los tapones causados por los estrechamientos del circuito en el primer kilómetro.
Unos primeros 2 kilómetros muy incómodos también por ir por encima de las líneas del tranvía, pero después en el km 3 ya se podía correr con comodidad.  
Paso por el km 5 en el ritmo previsto de 4'32" (22:41) pero ya en el km 7 no voy tan bien. No estaba cansado, pero de alguna forma sabía que no podía aguantar el ritmo mucho más tiempo. Bajo el ritmo un poco, y en el km 10 veo que sigo a buen ritmo, tras hacer el segundo parcial en 22:35. 

Intento coger el vaso de Isostar, la pierdo, y después el vaso de agua que sí cojo bien, pero me doy cuenta que más de un sorbo no es... 
(Como añoraba la maratón de Tarragona, donde los 'skaters' nos traían las botellas de Isotónica!)

Y seguimos, por calles nada interesantes, y con poca animación (aunque los y sobre todo 'las' que animaban lo hacían con mucha fuerza. Mi gratitud eterna!!) y sobre el km 13,5 llegamos a la soledad del Amstel. Un camino ideal para correr en tu tiempo libre, pero ahora necesitando el calor del público, y con un molesto viento, me sabía a poco. 
Si en Rotterdam todo el mundo disfrutaba de la maratón, con la gente aplaudiendo y gritando tu nombre con un grosor de 6 filas de 'animadores', aquí me sentía como hacía 30÷35 años haciendo una carrera por mi pueblo de 8000 habitantes.
Un recorrido nada turístico, que parece que lo que más han buscado ha sido molestar lo mínimo posible a los habitantes de la capital de Holanda. Nada de City-Marathon... pero quizás también es la gracia!

Bien, allí en el Amstel me doy cuenta que hoy no va a ser mi día. No hay forma de mantener el ritmo... de NADIE, y decido adelantar el primer gel. Me entra bien, pero no me da ningún subidón. 
Veo como todos me adelantan y empiezo a desesperarme un poco. Además tengo mucha sed, y no es hasta el km 16 (6 kms desde el último chupito) donde esta vez sí cojo dos vasitos de Isostar y dos de agua. Sigo corriendo, cada vez más lento, hasta el km 18 a 4'45" y hasta el km 21 a 5'00"/km. 
Paso la mitja en 1h37:58, pero sé que va a ser un calvario acabar la maratón.

Quiero caminar, pero sé que mi hermano me está esperando y veo que a ritmo de tortuga aun puedo bajar de las 3h30. Pues NO!!
Y ya puedo decir que después de sufrir los últimos 7 kilómetros... me mareo pensando en los 21 kilómetros más que me quedan de sufrimiento. 
Sigo corriendo, cada vez más lento, y noto un cierto dolor en el tórax (corazón?)
Deduzco que a este ritmo de ahora 5'30"/km mi pulso va a 100, pero ¡qué va! Mi corazón va a 163 y decido hacer un centenar de metros caminando. Me baja el pulso, pero al arrancar de nuevo vuelva a subir a 160. 

Viendo que no hay otra manera más rápida de finalizar este calvario, no me queda más remedio que correr lo más rápido posible... que finalmente resulta ser ir a un ritmo que nunca antes había experimentado.. de 6 minutos por kilómetro. 10 km/hora, poco más que ir caminando.... Impresionante!    
Cada kilómetro voy más encorvado, y parece que haya envejecido 10 años en 3 horas.
Y así llegaba a meta, mareado, avergonzado, y sin fuerzas ni ánimos para subir la cabeza los últimos metros por el tartán del estadio olímpico. La foto es el vivo ejemplo.

No hay ninguna excusa, porque el domingo se batió tanto el récord de la Maratón de Amsterdam, como también el récord holandés!! Mejor imposible!

Sigo preguntándome qué es lo que podría haberme pasado, y sigo sin encontrar las respuestas.
Si soy capaz de hacer 30 kilómetros por el río, solo, con tan solo un par de botellitas de agua, a un ritmo de 4'45"... por qué estoy sin fuerzas ya en el km 14. No lo entenderé nunca.

La verdad, un poco decepcionante esta maratón Gold Label, sin ni siquiera una línea azul, pero seguro que mi lamentable estado de forma ha hecho que no soy el más objetivo en este momento...

Lo bueno de tocar fondo es que ya solo puedes mejorar. 
El lunes me apunté enseguida para la maratón de Tarragona. Hay que quitar la espina, y ya!!
















4 comentarios:

  1. Ja saps que passa això en el món del córrer. Creiem estar bé i el dia més preparat i esperat no ens surt bé. Mai sabrem per quina raó passen aquestes coses. No hi ha més que seguir entrenar i esperar a que el dia en que no hi pensem ens surti la millor cursa.
    No t'amoïnis per anar a 6 el km. Aquest ja fa temps que és el meu ritme habitual en cursa.

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  2. Sí, Ricard, però si entrenant mai pujo de 5'/km, 6'/km és una cosa incomprensible.
    Suposo que els teus temps de cursa corresponen una mica més als entrenaments.

    Però bé, ja he plorat prou! Ara a pensar en la propera.

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  3. Vaya que cosa mas rara.. No sera de cabeza? Que te desmotivases al principio?
    Estuve viendo la carrera por Eurosport y no había ni el gato.
    Ahora nada a resarcirse en Tarraco!!

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  4. Sí, bastanta raro... lo que sí es cierto que llevo toda la semana con un dolor de cabeza, sinusitis, etc... pero aun así no lo entiendo.
    De cabeza no creo. Tenía incluso la falsa esperanza de hacer un 3h08÷3h09, e incluso a media cursa aun me veía al menos sub 3h30. Pero bien, en Tarraco no puede ir peor!!
    Gracias!!

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